Y de repente el silenci, la tranquilidad, el sosiego, ¿Qué ha pasado? pues muy fácil, que en un país en clara crisis económica en donde mucha gente se plantea que hacer para poder comer algo a fin de mes, hay dinero para que un grupo de políticos tengan el poder de acordonar una ciudad entera y darse una vueltecita por ella, con las incomodidades que eso plantea para sus ciudadanos, espero que por lo menos la publicidad que saquemos de esta tortura sea decente (cosa que dudo bastante)
Por cierto, si hay algún policía leyendo esto que sepa que no soy ningún criminal y que pasear por las calles de mi ciudad no es delito, que ya me encargo yo con mis impuestos de mantenerla y que no entiendo por que tengo que identificarme para hacerlo.
Besos desde una democracia dictatorial.