Como me gustan las tardes improvisadas, hoy estaba yo zascandileando por mi casa cuando unas voces me ha sugerido asomarme a la ventana, era Roci con Rebe y Angel que iban a recaredo a comer, me he apuntado a las cañas de después y una cosa a llevado a la otra y hemos acabado desgañitándonos con el divertimento Singstar, tales eran lo berridos que desde la calle nos ha oído la Charo y se ha unido.
Una de esas tardes informales que nos encantan
Besos de un Singstar.