Cuenta una reciente leyenda que Betty White, mas conocida por su papel de Rose Nylund en las chicas de oro, estando enferma en el hospital recibió un ramo de flores de parte de
Rue McClanahan, la encargada de interpretar a Blanche Devereaux, con una nota en la que ponía: “ojala te mueras, quiero ser la última chica de oro que quede viva”. Tan macabra broma (yo siempre le encontré el tono jocoso) no se ha cumplido, pese a ser casi 10 años mas joven que las otras tres, Rue murió ayer tras un derrame cerebral a los 76 años.
Un trágico suceso para la gente de mi generación que nos criamos viendo las libertinas ideas de este divertido personaje que creó escuela y que ha sido imitado hasta la saciedad, como, poco a poco, nos van dejando todos los que fueron los héroes de nuestra juventud. Para mi en particular, la sureña liberada Blanche me enseñó un punto de vista diferente de las cosas al que tenía yo cuadriculado en una ciudad tan facha como Toledo.
Besos pro chicas de oro.