Mosquitos y un tesoro (yo)

Joder, el miércoles se cebaron conmigo las mosquitos, anda que si me hubiera comido a besos alguien así, pero nada, soy incapaz de fascinar a nadie, ya me pueden volver loco que es que ni me miran, siempre llega alguien que les parece mas interesante que yo, que le vamos a hacer, menos mal que en el fondo se que quien no me quiere no me merece, si yo valgo un huevo, mucho mas que todos esos medio guapitos a los que doy mil vueltas ellos se lo pierden. A lo que iba, a los mosquitos de los cojones, sabéis que ni pude dormir de los picores? Creo que tuve hasta fiebre, y ahora parece que tengo varicela. Pero el resto fue otra Dolce Vita perfecta, como todas, por cierto, no debéis olvidar que soy el artífice y conservador de este evento tan divertido semanal en el que intento que lo paséis lo mejor posible y creo que lo consigo, como no voy a tener el ego subido, si soy la polla, cuantos guapitos quisieran tener este arte. Un miércoles glorioso donde vino hasta Raulito, que ilusión me hace verle y saber que es lector de este blog, lo que pasa es que siempre cuando nos vemos hay un montón de gente a la que atender por las dos partes y no nos da tiempo a hablar de casi nada, a ver si un día le cojo en privado y nos ponemos de verdad al día.

Ya he hablado con el fumigador y para el miércoles que viene ya estará solucionado el problema de los mosquitos, a si que no habrá excusa para no jugar al voley, venga, que tengo que aprender para machacaros.


Besos un tesoro comido por los mosquitos.