En Valencia

Aquí tirado en la Malvarrosa, playa que me recuerda a mi abuelo y a una persona a la que admiraba y quería, Concha, a quien puedo considerar mi abuela en funciones, me está viniendo a la mente muchísimas cosas. Un poco de sosiego es lo que necesita mi cuerpo para hacer recuento, afrontar y planear este nuevo curso que empieza, rememorar todo lo sucedido en los últimos días y, sobre todo, descansar.

El concierto de Fangoria fue apoteósico, mi casi anciana mente no recuerda a tantos toledanos y visitantes botando a la vez en sus fiestas, tanta cabezonería valió la pena. Del concierto en si tengo poco que contar que no haya hecho ya, pero del ambiente podría estar escribiendo durante horas, desde los primeros acordes de "Miro la vida pasar", canción con la que empieza el show, se alzaron los brazos, la gente empezó a cantar y bailar y no pararon hasta la ultima nota del "Gracias por venir" de doña Lina Morgan, con la que se hecha el telón, y si, ya os he podido destripar la sorpresa final, cualquier lector de este blog que no ha visto el espectáculo es porque no le ha dado la gana.

Quiero dar las gracias a todos y cada uno de los asistentes a la fiesta de despues por convertirla, pese a las adversidades, en la fiesta del verano en Toledo, el buen royo que se respiró allí a ritmo de las canciones del duo fue maravilloso, me hicisteis sentir querido y arropado, y encima me dejasteis poner la música que me dio la gana y no parasteis de botar hasta altas horas de la mañana, sois los mejores.

También quiero desde aquí pedir perdón públicamente por la falta de organización y el calor de la sala, aunque ahí tengo que decir que, ni Dani ni yo, tenemos la culpa, nosotros hicimos todo lo que teníamos que hacer, aunque a veces es difícil hacerse oír.

Bueno, voy a seguir tomando el sol junto con Esther y Michel antes de irnos a cenar con mi Petarda e Ines. Adoro estar en Valencia rodeado te tan buena gente.

Os quiero.

Besos para todos mis Xiquets y Xiquetas.